San Luis incentiva a los estudiantes con dinero

Aquellos alumnos que pasan de año a lo largo de toda la primaria y secundaria pueden canjear estampillas por U$S 1.200

En la provincia de San Luis, la ley VIII-0752-2011 de Estímulo Educativo y Concientización del Ahorro, fue aprobada en mayo de 2011 y originalmente impulsada por el ex gobernador Alberto Rodríguez Saá con el fin de fomentar el ahorro, desalentar la deserción escolar y evitar la repitencia.

La Ley “Estampillas escolares de ahorro para mi futuro” está destinada a los alumnos presenciales de nivel primario y secundario de toda la provincia. Desde primer grado, se le entrega a cada estudiante que pase de curso y no se lleve materias una estampilla de uso no postal con un valor nominal en dólares impreso en ella, que varía según el año que se haya aprobado. A los estudiantes que concurren a escuelas especiales se les entregan las estampillas según el grado o curso que corresponda a su edad cronológica. Al egresar, todos los escolares de óptimo desempeño habrán ahorrado 1.200 dólares.

 El dinero se paga en pesos según la cotización del dólar el día del cobro; sólo lo pueden canjear los estudiantes que ya hayan cumplido los 18 años en las sedes del banco Superville de toda la provincia. En caso de que todavía no hayan alcanzado la mayoría de edad, los padres o tutores pueden canjearlo por ellos. Esta medida no incluye a los niños que están en jardines de infantes, pero sí a los jóvenes y adultos que cursan el primario o el secundario acelerado.

El ministro de Educación de San Luis, Marcelo Sosa, resaltó a Cadena 3 los resultados del programa educativo “Estampillas para mi futuro”, que permite cobrar U$1.200 a alumnos de sexto año que no deban materias.

“El programa logró que los chicos volvieran a la escuela. Permitió que un 23% más de chicos se presentaran a rendir y mejoraron en un 33% los promedios. La cantidad de alumnos que han dejado de repetir equivale a 11 escuelas de tamaño mediano” sostuvo el ministro.

Continuando con los resultados del programa, Sosa agregó que “esto es lo que los pedagogos denominan situaciones de aprendizaje. Si el alumno no está aprendiendo y el docente no está enseñando, los planes y programas no sirven de nada. El paraguas bajo el cual se ampara este proyecto son los 190 días de clase que en San Luis se cumplen en su totalidad”.

Otras provincias también han optado por mantener motivados a los estudiantes con distintos programas y actividades. En el caso de Buenos Aires, el gobierno porteño organizó el concurso “Sumá Verde”, entre alumnos de 4º año de colegios públicos y privados para que junten envases plásticos, teniendo como premio principal un viaje de estudios (también hay tablets y biciletas).